MARTÍN PAZ SÓLO PIENSA EN SU CARRERA COMO SOLISTA, FELIZ POR SU NOMINACIÓN A LOS PREMIOS GARDEL
El músico y cantante, que integró durante 10 años Los Manseros Santiagueños junto a su padre, Onofre Paz, da por cerrada esa etapa en su carrera y sólo piensa en su consolidación como solista.
El 12 de setiembre dará su primer recital virtual, donde presentará sus grandes éxitos, entre ellos “Eterno amor”.
Y el 18 de setiembre estará expectante con la entrega de los Premios Gardel, ya que está nominado en la categoría “Mejor álbum artista de folklore”, por “Changuito de chacareras”.
-Toda la vida estuviste con la música.
-Siempre digo que arranqué profesionalmente a los 12 años. De muy jovencito acompañaba al hijo de Leocadio del Carmen Torres, el fundador de Los Manseros Santiagueños junto a mi papá. Con Hugo Torres arrancamos los dos solitos. Cosas de la vida que empezamos juntos como nuestros viejos y ahí se fue desencadenando toda una cuestión musical. A mis 14 años grabamos. A él se le dio su primera posibilidad como solista, para lo que hoy es Sony, y yo lo acompañé como músico. Imaginate lo que fue para mí grabar a esa edad para una empresa discográfica. Me sentía inmensamente feliz. Era un chico y ya me tocaba vivir esas cosas. Fue emocionante verme en la contratapa del LP (foto). Esto fue en el año 90. En el momento de grabar ya éramos cuatro. Se llamaba Hugo Torres y su conjunto: Bombo, dos guitarras y un bandoneón. Y otra anécdota es que ese fue el último año de los LP. Hasta ahora, que están volviendo a salir, sólo que cuestan carísimos.
-¿Cuántos discos llevás?
-Cinco como solista. Antes de entrar a Los Manseros, en el 2007, ya tenía tres. En el 2000 salió “Ecos cercanos”, en 2004 “Mi resplandor” y en 2006, “Lo mejor de mí”, que era un mix de los dos anteriores. En el 2007 entré a Los Manseros y con ellos grabé también cinco discos.
-¿Ya no hay chances de un reencuentro con Los Manseros?
-No, no…Ya lo veo al tren muy chiquito. Ya se fue. Ni el vapor veo.
-La gente lo sigue pidiendo.
-Sí, pero lamentablemente uno tiene motivos para eso. Naturalmente uno no debe ventilar ciertas cosas, pero deben de entender que hay motivos.
-¿Cuáles son tus expectativas para los Premios Gardel?
-Tengo esperanzas. Ojalá que se dé. Sería un buen aporte a mi carrera. Lo deseo con muchas ansias. Pero también estoy preparado, por si no se da, para seguir laburando como siempre, como lo vengo haciendo todos estos años, con el mismo cariño, con el mismo amor. Están puestas las mejores expectativas para este 18 de setiembre, la fecha de la entrega.
-Grabaste con Peteco Carabajal, con Jorge Rojas y con varios colegas más.
-Sí, en el disco anterior mío grabamos “Semilla de chacarera” con Peteco; con Jorge Rojas, “Eterno amor”, y con Cuti Leguizamón, “Homenaje para mi viejo”. Ahora, en este último, con Sergio Galleguillo (“Changuito chacarera”), con El Indio Rojas, con Roberto Carabajal y con Manolo Herrera, que es el hijo de Elpidio. Cuando estábamos grabando el disco, hacía poquito había fallecido Elpidio y quise hacerle un homenaje, encontré una chacarera sacheguita que la quise grabar y lo llamé a Manolo, que es el continuador del grupo.
-El último disco de Elpidio está compitiendo con vos en los Gardel.
-Sí. Ahí nos vamos a desconocer con Manolo, jaja.
-El 12 de setiembre tenés tu primer recital virtual. Posiblemente después vendrán otros. ¿Y cómo ves todo para el verano, cuáles son tus expectativas? Vos sos artista de los grandes festivales.
-Según las voces que uno ha podido consultar, todo viene para atrás. Tal vez se pueda hacer algo chico, como para 300 personas, pero no creo que sean posibles los festivales grandes. Mientras tanto vamos buscando estas alternativas, como la del 12 de setiembre. Es una manera de estar en contacto con la gente, que es lo que el músico más extraña.